El cable de alta temperatura, también conocido como alambre resistente al calor, está diseñado para soportar temperaturas elevadas sin comprometer su rendimiento o integridad. Estos cables están diseñados con materiales y técnicas de construcción especializados para garantizar la resistencia en condiciones de calor extremo, lo que los convierte en componentes esenciales en diversas aplicaciones industriales y comerciales. Los cables de alta temperatura se usan comúnmente en entornos donde los cables estándar se degradarían o fallarían debido a la exposición al calor. Industrias como la aeroespacial, la automotriz, la electrónica y la manufacturera dependen de estos cables para aplicaciones como cableado de motores, instrumentación de hornos, hornos, calentadores y sistemas eléctricos en entornos de alta temperatura. La construcción de Cables de alta temperatura Por lo general, involucra materiales como níquel, cobre u otras aleaciones que poseen propiedades excepcionales de resistencia al calor. Estos materiales a menudo se aíslan con recubrimientos o capas especializadas para mejorar su estabilidad térmica y proteger contra la degradación inducida por el calor.